Sinaloa-Concordia...o Concordia Sinaloa....

Que vasó raza¡¡¡ ???

Pues después de no se cuantas parrandas me decido a vaciar algo de información referente a la historia de Sinaloa y de algunos de sus templos religiosos más perrones ... Sinceramente he de decir que no profeso religión alguna, aunque creo en la existencia de alguna fuerza chingona que nos rige, incomprensible para mi, porque para hacerlo habría que estar en un nivel cercano a esa fuerza, mejor dicho, si no entiendo a alguna gente, perrada igual k yo, ¿Cómo ingaos wa poder entender a ese algo a lo que muchos llamamos Dios?...

Bueno, les decía, no profeso religión alguna pero me atrae ver las grandes obras que a lo largo de la historia de las diferentes perradas humanas se han logrado hacer para representar en una construcción arquitectónica a “la casa de Dios”, que si bien muy posiblemente no lo es, en estos templos podemos admirar las más grandes obras, llámese pintura, arquitectura, música, bla, bla bla...

¿Pero que tiene que ver esto con Sinaloa?... Ps resulta que dicen que la pichada estuvo más o menos así: los Sinaloenses de por allá el siglo dieciséis, eran grupitos indígenas que vivían bien a toda madre, pero (la misma historia) llegaron unos españolitos comandados por un tal Nuño Beltrán de Guzmán (Oh-oh, cuenten los Beltrán y Guzmán que conocen) que andaban chalineandole para abrir más placitas españolas... Bueno, la cosa es que este carbón de Guzmán acampó a las orillas del Rio San Lorenzo, cerca del Rancho de Navito, después este “campamento” se lo acarrearon para lo que es el actual Culiacán, en aquel entonces “San Miguel de Culiacán”, ubicada en donde convergen el Rio Tamazula y el Humaya...

Bueno, la cosa es que a los españolitos que traían sus rollotes religiosos no les fue muy bien con la raza del norte de Sinaloa, pero por acá en el Sur la cosa se puso más fácil, debido a que había raza chingándole al pico y pala, o lo que es lo mesmo, había raza chambiando en los reales de minas, en la agricultura y la ganadería, y bueno, eran pueblos organizados casi como los pueblos de los españolitos, con pueblos estructurados, con gobernadores, corregidores, alcaldes, bla, bla, bla...

Y matanga dijo la changa, que en estos pueblitos los españolitos hacen su agosto, y empiezan la construcción de los templos, y si, ya se imaginaran a que pueblos y que templos me refiero (a lo que dice el librito este que me chuté):

La Iglesia de San Sebastián en Concordia,
La de Nuestra Señora del Rosario,
y la de San Juan Bautista en Copala,
todas ellas construidas en el último tercio del XVIII, con fachadas estilo barroco, de cantera, y con una muy semejante distribución de sus cuerpos, con arcos de medio punto y enmarcados en columnas con decoración vegetal...

Y pa´cabar con este asunto escribiré la descripción de la iglesia de Concordia así como viene en el librito, ¿porqué?, bueno porque no les entiendo ni maíz a las descripciones e interpretaciones del arte y aquí tengo la foto y descripción de...

Dícese que el templo de “San Sebas” es el más bello de la entidad por su armonía y su encanto arquitectónico. Su construcción inició por allá en el 1700 y lo acabaron por allá en 1765. Su fachada es de estilo barroco sobrio, realizada en su totalidá en cantera, y con su portada de tres cuerpos. El primero presenta la puerta de acceso de arco de medio punto flanqueada por tres columnas a cada lado, ornadas con motivos geométricos y estrías, mientras que las jambas de la puerta y los pedestales de las columnas muestran motivos vegetales; un grueso friso (borde) decorado con un medallón custodiado por ángeles da paso al segundo cuerpo, en el que resalta la ventana del coro, en cuya base se observa el escudo papal, rodeada de ornamentaciones de estilo geométrico y vegetal. El tercer cuerpo presenta como figura central, dentro de un nicho, la escultura de San Sebastián, enmarcado por roleos, guardamalletas y ángeles. Sobre el nicho se encuentra la Virgen de Guadalupe y finalmente el remate mixtilíneo que cierra el conjunto. A la derecha un grueso contrafuerte se eleva para rematarse en un pedestal con columnas estriadas que sostiene a la imagen de Santa Bárbara; a la izquierda la monumental torre completa el equilibrio del conjunto, con s ventana de marco labrado y su bello cuerpo superior con pilastras y columnas abalaustradas que enmarcan los arcos de los campanarios.

Bueno, y se preguntarán, porque ingaos pongo cosas "sin importancia" (para algunos), bueno, pues resultase que mi infancia la viví en un rancho perteneciente a este municipio, El Magistral, y estos lares, su cultura y sus constumbres forman parte de los archivos del historial de mi cabezota... Espero lo disfruten ...